17.5.08

Destellos

Pasó como un destello por mi lado. Su polerón morado se vió a la distancia... bajaba la escalera con gran rapidez hacia la combinación de la L1, yo la habría seguido con más agilidad si no hubiera estado con una amiga... pensamientos furtibos cruzaron por mi mente. La encontré en el anden, como esperaba, miraba hacia el túnel por si venía el metro; tenía dos pearcigs en el labio inferior, uno a cada lado, el cabello negro y los ojos verdes. El metro paró y, por casualidad, me subí en el mismo carro que ella. Subí el volumen de mi reproductor de mp3 mirando hacia la ventana, casi ignoraba a mi amiga, la cual estaba a mi lado, de vez en cuando me miraba y sonreía... pero no hablaba conmigo.
Salvador, me despedí de mi acompañante, la chica se había sentado y yo me acerqué disimuladamente a donde estaba, me paré al frente de su aciento y miré hacia la ventana de nuevo. La miraba de reojo rogando que no se bajara pronto, se quedó dormida y apoyaba su cabeza contra el vidrio de la ventana, en ese momento noté que tenía una expanción el la oreja derecha, era roja...
Se paró una señora que estaba sentada en diagonal a ella, de inmediato ocupé el asiento libre. Miraba a la chica cada sierto tiempo... pero no podía hacerlo disimuladamente.
Despertó, justamente mientras la miraba, corrí la cabeza y traté de mirar un punto fijo en el aire.
Escuela Militar, todos se bajaron, ahí pensé que la iba a perder, era lo más seguro, perderla entre la multitud, y de hecho lo hice por alguos minutos; caminé rápidamente hacia las escaleras... y mientras lo hacía ví que en uno de los carros una señora se había quedado dormida, me dirigí hacia ella, le toqué el hombro y le dije "señora, estamos en escuela militar" ella me miró y me dió las gracias, me fuí levantando la mano y mientras subía las escaleras ví denuevo aquel poleron morado... la ví de nuevo... ya era demaciada casualidad... subí raudamente las escaleras y salí al frío exterior, caminé hacia la farmacia que quedaba serca y compre un axe... luego ingresé al enrrejado del paradero y ahí estaba denuevo... "si toma la misma micro que yo, es una señal" pensé ... pero qué! ninguna señal ... luego de unos minutos llegó una 406 al paradero y ella subió... Ahí gracias a la 406 la perdí finalmente de vista... talvez era la chica de mis sueños... pero no era para mi .

2 comentarios:

Catalina Pianola. dijo...

sssssssuer loco

TwentySeven dijo...

woow
interesante tu forma de contar anécdotas
me gostó mxo...
bueno, ns blogeamos ps,
cuiidate, byeeee

CoKe